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Toda persona debería comer, por lo menos, cinco porciones de fruta por día. Si aún no decides cuál fruta incluir entre tus meriendas, una buena opción es el mango, especialmente si sientes resequedad en los ojos o pasas mucho tiempo frente a una pantalla.
No importa si se trata de un pequeño mango de azúcar o de unas buenas rodajas de mango biche con limón y sal; comer mangos con frecuencia puede ayudar a cuidar la visión de problemas como el "ojo seco" o la baja visión nocturna.
La mayoría de frutas son ricas en nutrientes. Convenientemente, los pigmentos de las frutas suelen indicar los beneficios que pueden traer al organismo. El mango, por ejemplo, le debe su famoso color amarillo a moléculas naturales como los carotenos (que se convierten en vitamina A), la zeaxantina y la luteína.
Las personas tienen una mancha amarilla en el interior del ojo que ayuda a percibir detalles, como las caras y las letras de este artículo. Dicha área se llama mácula lútea y está compuesta, precisamente, de zeaxantina y luteína.
Factores como la edad hacen que disminuya la cantidad de estas moléculas. Como consecuencia, el ojo empieza a sufrir de resequedad, ceguera nocturna y hasta cicatrices en la córnea.
Cuando una persona come mango u otros alimentos ricos en vitamina A, se refuerza la salud de la retina del ojo. La zeaxantina y la luteína refuerzan la mácula lútea y funcionan como protectores contra el sol y la luz azul. Eso sí, tu vista te lo agradecerá si puedes ayudarle con unas buenas gafas de sol o antirreflejo.
Los mangos también son famosos por su poder antioxidante: Además de la vitamina A, que estimula la creación de nuevo colágeno (bueno para la salud del cabello, las uñas y la piel), también es rico en vitaminas B6, C y D.
Además, es antiinflamatorio: Ayuda a controlar el deterioro de otras partes del cuerpo causados por el ambiente o el estrés. Incluso existen estudios sobre el consumo de mango como forma de prevenir el cáncer de colon, por su contenido en fibra.
Ahora que te has llenado de motivos para consumirlo, busca un mango para las meriendas y disfrútalo mucho.
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