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A veces el problema no está en el servicio, sino en lo que está alrededor del dispositivo.
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Creativa Digital
Tener una buena conexión WiFi es casi tan esencial como la energía eléctrica. Ya sea para trabajar desde casa, estudiar, ver películas en streaming o simplemente navegar por redes sociales, la estabilidad del internet es clave para que todas las actividades digitales funcionen sin interrupciones.
Sin embargo, no siempre que la señal falla o la velocidad baja se trata de un problema con el proveedor de internet. Muchas veces, la razón está dentro del hogar, más exactamente en los objetos que rodean el router.
Lo que pocas personas saben es que ciertos electrodomésticos o materiales comunes —que usamos todos los días— pueden interferir con la señal del WiFi y hacer que la velocidad se reduzca o que la conexión se vuelva inestable, incluso si pagas por un buen plan de internet.
Los teléfonos fijos inalámbricos (especialmente los que funcionan en frecuencias de 2.4 GHz) pueden interferir directamente con la señal del WiFi, ya que utilizan la misma banda de frecuencia que muchos routers. Esto genera ruido e interrupciones, haciendo que la conexión sea más débil o inestable, sobre todo durante llamadas.
Recomendación: Evita colocar el router cerca de la base del teléfono inalámbrico. Si es posible, usa teléfonos que operen en una frecuencia distinta o cambia tu router a la banda de 5 GHz si es compatible.
El microondas es uno de los electrodomésticos que más interfiere con la señal WiFi, especialmente cuando está en uso. Al funcionar, emite ondas electromagnéticas en la misma banda que muchos routers (2.4 GHz), lo que puede bloquear o ralentizar la señal en áreas cercanas.
Recomendación: No coloques el router en la cocina ni cerca del microondas. Si tu cocina está entre el router y la zona donde navegas más, considera reubicar el equipo.
El metal es uno de los materiales que más bloquea las señales inalámbricas. Objetos como estanterías metálicas, archivadores, espejos grandes con marco metálico, refrigeradores o incluso decoraciones metálicas pueden reflejar o absorber la señal del WiFi, reduciendo su alcance.
Recomendación: Asegúrate de que el router esté en un espacio libre de obstáculos metálicos, especialmente en línea recta con los lugares donde usas internet con frecuencia.
Para asegurar una señal estable y de buena velocidad, ten en cuenta estas recomendaciones: - Centro del hogar: Ubica el router en un lugar central para distribuir mejor la señal. - Lugar elevado: Colócalo sobre una mesa, repisa o estante, nunca en el suelo. - Espacio abierto: Evita encerrarlo en cajones, bibliotecas o detrás de muebles grandes. - Lejos de ventanas y paredes gruesas: Los cristales y muros pueden debilitar la señal. - Sin obstáculos alrededor: Deja al menos 30 cm de espacio libre a su alrededor.